CON LA INTENCIÓN DE RECUPERAR LOS JUEGOS TRADICIONALES...
La sociedad vasca siempre se ha preocupado por el futuro de los niños y sin perder la perspectiva del pasado, ha transmitido sus valores, costumbres, conocimientos y “juegos” a la siguiente generación.
Hoy en día, este proceso se ha detenido en gran medida y tras observar el uso del ocio diario de los niños, vemos que los juegos tradicionales están cada vez menos presentes en sus propias actividades.
En las escuelas, aunque se utiliza el juego como contenido y recurso, dominan los modelos ofrecidos por los medios de comunicación, por lo que la tendencia natural de los niños a reunirse y jugar juntos se ha reducido en gran medida.
Por todo ello, nos pareció interesante encontrar el lugar que debían tener los juegos tradicionales, adaptando los juegos tradicionales a la práctica cotidiana, elaborando juegos y poniéndolos en práctica. A partir de 2011, nos animamos a descubrir las tradiciones de otros territorios. Para ello, visitamos varias regiones de Europa y decidimos fabricar juegos locales antiguos (principalmente juegos de madera) y utilizarlos como una opción innovadora para las fiestas de los pueblos.
Ahora hemos dado un paso más. Viendo que este campo está bastante cubierto, creamos otros proyectos innovadores: «El bosque de Zuresku: El rincón de los sentidos y los pequeños sueños«, «Deporte rural«, «Topa Araba«…
El objetivo es «Ampliar lo posible la oferta de juegos participativos para niños y mayores». Niños-niñas, padres-madres, abuelos-abuelas disfrutan jugando y nosotros estamos muy felices con el camino tomado.